Lo que se está viviendo desde ayer en la plaza española de Ceuta es una auténtica crisis migratoria sin precedentes. Y es que cerca de 6.000 ciudadanos marroquíes, entre los que habría 1.500 menores, han accedido irregularmente a la ciudad autónoma desde la madrugada de este lunes bordeando el espigón marítimo fronterizo de Benzú, a nado y en balsas, en la bahía norte, y del Tarajal ante la pasividad de las Fuerzas de Seguridad marroquíes, recoge RTVE

Se trata de la segunda entrada masiva en la Ciudad Autónoma en lo que va de año, ya que el fin de semana del 25 y 26 de abril accedieron a la ciudad un total de 149 inmigrantes marroquíes, entre ellos unos 40 menores. Pero de 150 a 6.000 van muchos de diferencia…

Pero la cosa no tiene visos de acabar porque las informaciones apuntan a que el ‘efecto llamada’ motivado por la pasividad de Marruecos ha hecho que empiece a llegar gente a la población marroquí de Castillejos -distante unos dos kilómetros de la frontera ceutí-, a la espera de poder entrar en la ciudad española.

 

Y, para más inri, un total de 86 migrantes subsaharianos han entrado en actitud violenta en Melilla este martes de madrugada a través de la valla del puerto, según Delegación del Gobierno en la Ciudad Autónoma. Se trata de 85 hombres y una mujer, en una acción en la que tres guardias civiles y la mujer han resultado heridos por la agresividad mostrada por los que accedían usando pedradas, recoge RTVE.

PSOE y Podemos, que tanto criticaron, por racistas, las devoluciones en caliente, se enorgullecen ahora de haber devuelto 1.500 ilegales marroquíes en 24 horas

¿Y qué hace el Gobierno español de Pedro Sánchez, la ministra de Exteriores Arancha González Laya y el de Interior Fernando Grande Marlaska?

De momento, el ridículo más espantoso. Porque González Laya asegura que esta crisis migratoria “no es fruto de un desencuentro” con Marruecos. Cuando todo el mundo sabe que este país amenazó a España con consecuencias por atender en Logroño al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, por covid-19. Laya ha añadido, en un alarde de simpleza diplomática: "No concibo que se pueda poner voluntariamente en peligro la vida de jóvenes y de menores en respuesta a una acción humanitaria”.

Otro que está haciendo el ridículo es el ministro del Interior,  Fernando Grande Marlaska, quien preguntado en TVE por la petición de Santiago Abascal de desplegar al Ejército en Ceuta, el ministro ha querido llevar la contraria al líder de Vox tachándolo de “soluciones simplistas”. Cuando eso es exactamente lo que está haciendo el Gobierno desde ayer: movilizar al Ejército, concretamente a las unidades de La Legión y Regulares, para reforzar a las fuerzas de seguridad, recoge RTVE.

Grande-Marlaska ha asegurado que ya han sido devueltas 1.500 personas de los alrededor de 6.000 migrantes que han entrado en Ceuta en las últimas horas y ha asegurado que se están tomando “todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad, proteger las fronteras y proceder a la devolución de una forma efectiva" en coordinación con las autoridades de Marruecos, recoge también RTVE.

Lo que son las cosas: el PSOE y Podemos, que tanto criticaron, por racistas, las devoluciones en caliente, se enorgullecen ahora de haber devuelto 1.500 ilegales marroquíes en 24 horas… ¿Será que no hay nada como toparse con la realidad para tener que gobernar en contra del consenso progre?

Y otro que también está haciendo el ridículo, aunque en este no es nuevo, es el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha cancelado hoy el viaje previsto a Paris y ha "fijado como prioridad devolver la normalidad a Ceuta" después de la llegada masiva de migrantes a la ciudad autónoma en las últimas horas. Lo ha dicho en su cuenta de Twitter.  

Tuit Sánchez

Pero Sánchez bien sabe que Mohamed VI se ha burlado de él…