La Audiencia Nacional ha absuelto a Rodrigo Rato y a los otros 33 acusados en el juicio por la salida a bolsa de Bankia, de delitos de estafa a los inversores y falsedad contable. Según la sentencia dictada este martes por la Sala de lo Penal de la Audiencia (ver el documento al final) no hubo engaño en la información de la OPV, que recibió el visto bueno de todos los supervisores: la CNMV, el Banco de España, el Frob y la EBA (la Autoridad Bancaria Europea).

La salida a bolsa permitió a Bankia captar 3.092 millones de euros.

Por cierto, como recordarán, en 2016 y tras recibir varias sentencias condenatorias, Bankia decidió devolver el dinero a todos los inversores minoritarios que acudieron a la OPV. Ahora, la vía penal, más lenta que la civil, ha establecido que no hubo engaño.

Vamos con Rodrigo Rato. El expresidente de Bankia fue condenado a 4 años y medio de cárcel por el caso de las tarjetas opacas (la Fiscalía pedía 8 años y medio por la OPV). Durante su mandato (febrero de 2010 a mayo de 2012), los miembros del consejo de administración gastaron en total 2,6 millones de euros, de los que 99.041 euros le correspondieron a él. Rato lleva en prisión desde octubre de 2018 -ha disfrutado de algunos permisos por buena conducta- y aún no se le ha concedido el tercer grado por estar pendiente la sentencia del juicio por la OPV, que ha resultado absolutoria.

Otrosí: la decisión de la AN pone en solfa al entonces ministro de Economía, Luis de Guindos. Porque, si Bankia valía lo que valía y no hubo engaño, ¿de verdad hubo que poner 24.000 millones de dinero público para rescatarla?

Sea como fuere, saltan a la vista las similitudes de este caso con el de la resolución del Popular, en el que se investiga si el Consejo de Administración presidido por Ángel Ron engañó para llevar a cabo la ampliación de capital de 2.500 millones de euros, en mayo de 2016. La entidad fue intervenida y entregada al Santander por un euro en junio de 2017. ¿Engañó la cúpula del Popular en la ampliación, como se pensaba que había engañado Bankia en la OPV?

Porque la ampliación del Popular gozó del visto bueno de los supervisores, como también lo hizo la OPV de Bankia, ahora refrendada por la Audiencia Nacional.

En cualquier caso, la ampliación del Popular presenta dos diferencias significativas: no hubo reformulación de las cuentas, como sí hubo en Bankia, y los miembros del Consejo pusieron 500 millones de euros en la ampliación, mientras los consejeros de Bankia no se jugaron su patrimonio en la OPV.