El presidente del Gobierno Pedro Sánchez siempre 'cae de pie', es decir, termina saliendo airoso de las situaciones por las que podría haber perdido el poder. La última, las elecciones generales de hace un año (23 de julio de 2023), que le permitieron seguir gobernando, bajo una coalición Frankenstein con todos los enemigos de España (Sumar y todos los partidos independentistas, gallegos, vascos y catalanes).

Eso sí: llegó al poder de nuevo tras mentir por enésima vez a los españoles. Porque 24 horas antes de esos comicios enfatizaba que la amnistía a los delincuentes del 'procés' era absolutamente "inconstitucional". Y 24 horas después, como necesitaba los votos de Junts y ERC para ser investido presidente, aseguraba que es "perfectamente constitucional" y necesaria para el progreso de España. 

Estos engaños y mentiras, por mucho que los envuelva o trate de justificar como necesarios "cambios de opinión", han cabreado a muchos españoles, que al fin y al cabo no son idiotas y se sienten engañados por el autócrata de la Moncloa.

Por no hablar, claro está, de las investigaciones judiciales a su esposa, Begoña Gómez, o a su hermano, David Sánchez…

Quizá por eso, y por muchas otras tropelías que ha  venido cometiendo --como la colonización de instituciones tan importantes como el Tribunal Constitucional, la Fiscalía General del Estado, el CIS, el INE, etc.--, es decir, por deteriorar la democracia española hasta límites nunca antes vistos, la encuesta de hoy de El Mundo arroja un resultado esclarecedor: para el 60% de encuestados, Pedro Sánchez es un mal presidente del Gobierno.

Es decir, que Sánchez cae mal a mucha gente y no son pocas las veces que ha resultado abucheado en sus apariciones públicas. E incluso en algunas ocasiones, como en el comienzo de las fiestas de Tudela (Navarra) hace escasos días, los tudelanos se 'acordaron' de él con algún cántico parecido al 'me gusta la fruta' de Isabel Díaz Ayuso... 

Por no recordar los recientes episodios de los gélidos saludos de muchos de los jugadores de la selección española de fútbol, en la recepción en Moncloa, tras ganar la Eurocopa…

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Y este martes, en la recepción que Sánchez ha ofrecido a los deportistas olímpicos y paralímpicos que van a disputar los Juegos de París, uno de ellos, el saltador Nicolás García Boissie, quiso ignorar a Sánchez completamente: 

Politólogos aseguran que cuando un líder político empieza a ser denostado por los ciudadanos comienza su declive. Pero, ¿estamos ante el principio del fin del Sanchismo o volverá a resucitar y a ‘caer de pie’ en los próximos comicios?  

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