El Consejo de Ministros estudiará este martes 6 de julio otra de las ocurrencias de los neocomunistas de Podemos: la ley de libertad sexual conocida como ley del “sólo sí es sí”. No lo duden: saldrá adelante. Hace tiempo que Pedro Sánchez, enloquecido con la ideología de género, pugna con los podemitas por ver a quién se le ocurre una cretinada mayor en materia de ideología de género, hasta el punto de haber convertido a Carmen Calvo en la moderada del Ejecutivo. 

Estamos ante una nueva mentecatez podemita: la sexualidad humana no cabe en el BOE

El problema de las tautologías -solo sí es sí- es su simpleza. La tautología es una verdad tan palmaria que no sirve para gran cosa y que, atención, convertida en ley, es decir, en coacción, se convierte en una grandísima mentira y en una peligrosa injusticia. La sexualidad humana no cabe en el BOE y nadie otorga un consentimiento expreso para las relaciones sexuales ni, sobre todo, para el voto de entrega que conlleva la sexualidad humana… si quiere ser humana, nada que ver con el instinto animal.

Y claro, sólo una mente tan preclara como la de Irene Montero podría convertir en ley una tautología.

Cada vez son más las mujeres que no soportan esta venganza general contra el varón, predicada por el feminismo

Además, ¿seguro que sólo el sí es sí? Si esta ley acaba tal y como empieza su tramitación, nos encontraremos con un nuevo coladero para desaprensivas, el instrumento ideal para cualquier mujer retorcida que quiera vengarse de un varón.

Tranquilos: esta época de chifladura pasará. Cada vez son más mujeres las que no soportan esta venganza generalizada contra el varón, bien por un ideal de justicia o bien porque choca contra una de la virtudes más propias de la feminidad y, por tanto, negadas por el feminismo: construir es mejor que destruir y acoger es mejor que repartir despojos.

“Sólo sí es sí”. ¿Seguro?