Don Pedro Sánchez ha acudido, nuevamente, a 'su casa', la cadena Ser, una entrevista de una media hora donde el presidente se ha sentido cómodo. Le piden que definan en queé consiste ese invierno complicado que nos viene, él responde que es "la incertidumbre", naturalmente, "trasladada por una guerra de una persona", y que su deber es "trasladar certidumbre", que "no es dorar la píldora", pero tampoco "entrar en el catastrofismo", el presidente justifica su postura haciendo gala de la economía española, turismo, empleo.... Quien no presume, es porque no quiere. Àngels Barceló, entrevistadora, asiente con la cabeza, ni una palabra de la realidad en España: medalla de oro en paro, de plata en deuda y de bronce en inflación. 

Después de defender su gestión y atacar una y otra vez al partido popular, es preguntado por Yolanda Díaz y sus declaraciones sobre la patronal y el hecho de que una ministra y vicipresidenta azuze a las masas contra la CEOE. Sánchez, rey de la tontología, apuesta porque "puedan desbloquearse las negociaciones" y asegura "Respeto el derecho a la manifestación de cualquier colectivo u organización". Es decir, pregunta: ¿apoya a la ministra y las manifestaciones? Respuesta: manifestarse es un derecho, ¡Faltaría más, señor presidente! Pero en este punto, para que Sánchez siga cómodo, en la entrevista no se le pregunta por las declaraciones de la ministra ecológica Ribera :"Hay inquietud y preocupación, pero al Gobierno le corresponde a portar soluciones, más que manifestarse"... habrá sido un despiste.

Sánchez ha asegurado que "Sí, habrá aumento en el gasto de Defensa, ese es el planteamiento que haremos",  "Al final será un diálogo, una negociación, y habrá acuerdo", y  'aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid', carga de nuevo contra el PP, necesitan 176 votos para todas sus medidas, y la oposición vota en contra, asegura que se ha sentido solo y poco ayudado por los populares, y que no entiende cómo un partido puede votar en contra de la gratuidad de bono transporte, que es lo que necesita la clase trabajadora. Y ojo, asegura que ha bajado impuestos, no sabemso cuales. Casi al término de la cita, es preguntado por la Reforma Fiscal que "sus socios de Gobierno le piden", pone en valor las medidas fiscales adoptadas para "el reparto justo" de la crisis, el impuesto a la banca, a las energéticas y saca a relucir el libro realizado por expertos, recuerden, los expertos 'independientes'. 

Y aquí viene la parte más sangrante, su defensa al acercamiento de los presos de etarras, "el Gobierno está cumpliendo con la legislación penitenciaria". Hombre, ¡faltaría más que el Gobierno hiciera algo que no fuera legal! El problema es que no es moral. El presidente del Gobierno ha defendido que "no cambia nada", y que cumplirán "íntegramente las condenas", olvidando que competencias penitenciaras están transferidas al Gobierno vasco, es decir, que ya se encargará Urkullu de cuidarles y concederles un tercer grado rapidito. 

La hermana de Miguel Ángel Blanco reaccionaba así: 

La entrevista, de una media hora finaliza, no sin antes presenciar una nueva cuña publicitaria de la Ser en favor de Moncloa, "la ventana está abierta, a esta hora mucho mejor tenerla abierta, que poner el aire", fuera corbatas y abiertas las ventanas, así se sale de una crisis: ¿comprenden?