• 'Hablemos sobre la felicidad' es un asombroso diálogo entre el pensador Fernández Aguado y Sandra Ibarra, activista contra el cáncer y presidenta de la fundación que lleva su nombre.
Hace ya unos añitos, cayó en mis manos el libro La felicidad posible, del pensador Javier Fernández Aguado, y ahora me encuentro, como por casualidad, con Hablemos sobre la felicidad, otro libro sobre lo mismo pero con un enfoque radicalmente distinto. El primero está tejido sobre pensamientos breves de Fernández Aguado, muy sugerentes, sobre ese anhelo tan humano. Uno encuentra de todo en ese libro sobre la vida cotidiana y las grandes aspiraciones. "Alargar las jornadas no asegura mayor rendimiento, pero sí que se estropearán las relaciones con la propia familia", dice en uno de los 1.000 consejos que contiene el libro, agrupados temáticamente. En el segundo libro, Fernández Aguado deja de ser autor para ser uno de los dos interlocutores, junto a Sandra Ibarra, que ha elegido el periodista Juan Ramón Lucas para hablar de eso, la felicidad. Y el diálogo, no se lo oculto, es apasionante, entretenido, lúcido, enriquecedor. "Aristóteles, en su Ética a Nicómaco -señala en un momento de la conversación Fernández Aguado-, indica a su hijo que en la vida hay que saber tres cosas: dónde estamos, dónde nos gustaría estar y cuál es el camino para llegar. En mi opinión, la felicidad forma parte del objetivo y del modo en que caminamos hacia ese objetivo". De Javier Fernández Aguado ya hemos hablado algunas otras veces, a raíz de algunos de sus libros recientes, como El management del Tercer Reich, o a propósito de lo que se dice de él en Pensadores españoles universales. Fue además noticia recientemente por el Micro de Oro 2015 con que el que el Foro Ecofin le reconocía como mejor conferenciante contemporáneo en español. Es una de sus actividades profesionales como presidente de la firma MindValue. La otra protagonista de la conversación con Lucas es Sandra Ibarra, presidenta de la Fundación de Solidaridad contra el Cáncer que lleva su nombre. Ibarra ha superado en dos ocasiones la enfermedad de la leucemia, y sabe un porrón de lo que es, más allá de la supervivencia, la superación personal, en positivo, y de la inteligencia emocional. "Hay mucho psicólogo a tu alrededor, gente que opina sobre la vida de los demás -afirma Sandra en un momento de la conversación- y es incapaz de gestionar la suya, dan consejos gratuitamente y sin pensar. Influimos en la vida de las personas que están en nuestro entorno. Y una motivación positiva o negativa te puede cambiar la vida". Los dos, Fernández Aguado o Sandra Ibarra, mantienen una larga y amena tertulia de casi doscientas páginas, conducidos por Juan Ramón Lucas, que sabe sacar lo mejor de cada uno de ellos con una audacia valiente, creativa y sincera. Él es el tercer el hombre, tan necesario como Aguado o Ibarra para hilvanar un relato asombroso. Lucas dice que ese relato es "lo más fiel posible" a los encuentros que mantuvo con los protagonistas, antes de escribir el libro, "en los que la conversación fluía, iba de un lado para otro, saltaba, regresaba, ahondaba y recuperaba comentarios anteriores". Es así. Y nada se escapa en esas conversaciones. "Las grandes preguntas de la humanidad son siempre las mismas, lo que sucede es que, cuando son respondidas, pasan al olvido y pronto la segunda generación se las vuelve a hacer", se dice en un momento de diálogo. La felicidad, desde luego, es una de ellas. Rafael Esparza rafael@hispanidad.com