Sr. Director:

«Uncharted» (Inexplorado) es una película yanqui de aventuras infantiloides basada en unos videojuegos del mismo nombre que aprovecha el 500 aniversario de de la gesta de Magallanes y Elcano. La peli fantasea encadenando peripecias generadas por «el bueno» (heredero del pirata Drake) tras las pistas que conducirían hacia unas supuestas naves llenas de oro escondidas por Magallanes antes de morir. Pero cualquier español con algo de orgullo por serlo, la verá con un regusto amargo por el «leyendanegrismo» antiespañol que inspira su guion y que se manifiesta al poco de su inicio, cuando nos explica que el malo (encarnado por Antonio Banderas) es el heredero de una terrorífica familia española («los Moncada»), que históricamente no solo financiaron a Magallanes en busca del sangriento oro, sino también «las Cruzadas, la Inquisición y a los fascistas de Franco: las cosas más horribles de la historia» (sic). ¡Toma ya! En los títulos de crédito finales aparecen como colaboradores, instituciones como el Ayuntamiento de Barcelona y, por supuesto, el Gobierno de España. ¿Alguien se imagina al Gobierno británico, al francés, al yanqui..., financiando películas fantasiosas donde se denigrasen mendazmente sus mejores gestas? Y es que nuestros peores enemigos somos nosotros.