Sr. Director:
Tras la vertiginosa subida del precio de la electricidad, la pregunta que se plantea, ante la perplejidad y el malestar social, es qué puede hacer el Gobierno. La respuesta llegaba de la Unión Europea cuya comisaria de Energía, Kadri Simpson, respondía a una pregunta del Partido Popular que el Gobierno tiene en su mano instrumentos suficientes para evitar la mayor escalada del precio de la energía de la historia. Sánchez, sin embargo, prefirió guardar silencio en una de las apariciones públicas durante sus vacaciones donde no dejó de jactarse de la próxima aparición de una vacuna española contra el Covid-19.
Por muchas excusas que alegue la ministra de Hacienda, echando incluso la culpa de las subidas a los anteriores gobierno del Partido Popular, lo cierto es que el principal beneficiado de las subidas es el propio Gobierno que el pasado año recaudó más de 11.000 millones de euros en impuestos a la energía gracias, en buena medida, a las ganancias de las propias eléctricas. Lo que ocurre es que el Gobierno necesita estos ingresos dada la escalada del gasto público, otro de los cánceres que minan la estabilidad social.