Se jalean con el PP en Madrid con el PSOE en Andalucía y están dispuestos a mediar con el PSOE en Valencia. Ideológicamente hablando estos chicos de Ciudadanos son un tanto promiscuos. Ya lo ha dicho su líder, Albert Rivera (en la imagen): se acabaron los rojos y los azules. Esto de la desideologización queda muy bien sobre el papel, pero se corre el peligro de que nos dé igual los rojos que los azules. Y entonces, ¿para qué sirven las elecciones? ¿Para qué elegimos entre uno y otro si no importa lo que sean? ¿Que solo buscamos honradez? En primer lugar eso es falso. También buscamos eficiencia, y todo el mundo prefiere tener al lado a un médico eficiente y retorcido que un doctor bueno pero incompetente. Además, siempre que alguien detesta a los rojos y a los azules suele acabar en negro. En cualquier caso, la pregunta es la misma: ¿En qué cree el señor Rivera? ¿Sólo en lo que le conviene? Hispanidad redaccion@hispanidad.com