Los promotores inmobiliarios ofrecieron al anterior gobierno la posibilidad de construir un elevado parque inmobiliario en alquiler de pisos pequeños, pero baratos. El anterior gobierno tuvo el enorme error de despreciarlo. Y Trujillo hereda ese proyecto. Se construirán 10.000 viviendas para universitarios con una superficie de entre 30 y 45 metros cuadrados con un coste entre 75 y 200 euros al mes. Se harán 200 viviendas en cada una de las 50 universidades con las que se ha alcanzado el acuerdo. Podrán acceder tanto los universitarios como los profesores y tendrá una duración máxima de 5 años mientras se mantenga la vinculación con la universidad.
Es un modelo que ya funciona en países como Alemania, Francia, Bélgica, Noruega o Finlandia y que permite el acceso temporal a una vivienda acorde a las necesidades y al presupuesto del estudihambre. Vivienda pondrá la mitad de los 300 millones de euros que supondrá la inversión. Cada casa costará una media de 30.000 euros, un precio razonable que demuestra que se pueden hacer pisos baratos si existe verdadera voluntad política.