Endesa para en seco el intervencionismo del Gobierno Zapatero. Al fondo, ENEL espera su oportunidad. EL PSOE considera ahora que el objetivo a batir es la Comunidad de Madrid y Miguel Blesa, que ha convertido a Caja Madrid en uno de los grandes grupos industriales españoles
6% de Gas Natural y 13% de Fenosa: los catalanes se conformarían, y luego ya vendría ENEL
Caja Madrid, dirigida por Miguel Blesa, amigo personal de José María Aznar, ha dado el gran golpe de man ha elevado su participación en Endesa, presidida por Manuel Pizarro, del 5 al 9%, precisamente cuando La Caixa pedía un consejero en la eléctrica para justificar su 5% de capital.
Con esta fulgurante operación, Manuel Pizarro y Miguel Blesa, dos empresarios a los que el Gobierno Zapatero persigue con denuedo, han conseguido zafarse, no de La Caixa, con quien Pizarro había pactado en su día, sino del Gobierno y en concreto del ministro de Industria, José Montilla. La victoria de FG (aunque el ataque contra el presidente del BBVA se reaunudará tras le verano) llevó a Montilla a intentar desbancar a Pizarro de la presidencia de Endesa, forzando una fusión que primero era entre Repsol-Gas, Endesa y Agbar, para luego quedarse en Gas Natural y Endesa.
Sin embargo, la presencia de Caja Madrid hace todo mucho más difícil, e incluso condiciona cualquier tentación de desplazar a César Alierta de la presidencia de Telefónica. La Caixa niega que vaya a comprar más endesas, y en el sector eléctrico se habla de que podía cambiar su objetivo y conformarse con una fusión entre Gas Natural y Unión Fenosa, la eléctrica que Emilio Botín ha puesto en venta. Gas Natural ronda ya el 6% de cuota en el mercado eléctrico mientras Fenosa representa un 14. Total: una compra de un 20%. Además, el socio industrial de Fenosa, la italiana ENEL, suspira por aumentar su presencia en España, y se trata de un gigante que pede entrar en los grandes pactos político-empresariales entre Zapatero y Berlusconi, donde se han puesto muchas cartas sobre la mesa: Tele 5, BBVA-BNL, Fenosa, Endesa en Italia, etc.
En cualquier caso, los grandes triunfadores son Manuel Pizarro y Miguel Blesa. Este último pretende ahora una caja que se ha convertido en uno de los grandes grupos industriales españoles, con Endesa, Iberia, Indra, etc, como sociedades clave. No tanto como su gran competidor, La Caixa, pero estamos en ello.
El ex presidente del Gobierno, José María Aznar, no ha sido ajeno a la operación. Aznar insistía a su amigo Manuel Pizarro en que Endesa era demasiado importante para caer en manos de La Caixa, entre otras cosas porque Aznar siempre ha considerado que la primera eléctrica española, casi monopolio en Cataluña y Andalucía es clave para la vertebración industrial del país.
Por su parte, los socialistas están convencidos, hoy más que ayer, de que su gran asignatura pendiente en materia político-empresarial es al conquista de Madrid, y por tanto, entre otras cosas, de la caja de ahorros capitalina.