Sr. Director:
Batasuna, bajo distintos nombres recibe dinero público de todos los
españoles, la violencia callejera aumentó desde que Zapatero está en el poder, los terroristas callejeros están envalentonados con este proceso de paz del que desconfía media España.
Eta lleva casi un millar de muertos a sus espaldas en sus macabras cuatro décadas
de existencia, con secuestros, amenazas, extorsiones, chantaje, miles de heridos, familias destrozadas, millones en pérdidas materiales... y jamás han dado
síntoma de arrepentimiento alguno. Sus treguas han sido siempre trampas para ganar tiempo y rearmarse.
La secesión de las Vascongadas de España, apropiarse de Navarra y del llamado país Vasco-Francés es la excusa para la siembra de tanto terror. Recordemos que
históricamente, el País Vasco jamás fue una nación independiente, excepto en la mente de un racista alucinado llamado Sabino Arana que de independentista
pasó al final de su vida a autonomista, algo que calla el PNV y el mundo radical.
Zapatero no puede regalar indulgencias políticas ni penitenciarias a Eta para perpetuarse en el poder, su efecto sería justamente el opuesto. La paz no tiene precio, y una amnistía encubierta de presos etarras sería una ilegalidad.
El entramado Batasuna-Eta, sigue pidiendo lo de siempre, no se arrepiente de nada, y con el visto bueno del Ministerio del Interior, se manifestará el domingo.
¿Nos hemos vuelto locos, o qué?
Antonio Quiroga Fortún
quirogafortun@yahoo.es
