Rajoy afronta su semana negra: entre la corrupción y el paro

• Los brotes verdes económicos se diluirán cuando la EPA del jueves 24 anuncie los seis millones de parados.
• Por eso, Guindos se ha apresurado a decir que no habrá más recortes ni más impuestos.
• Sin embargo, las tres grandes partidas de gasto -pensiones, sanidad y educación- aún deben recortarse.
• No, no habrá remodelación de Gobierno.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (en la imagen) afronta la semana más negra desde que llegó a La Moncloa. Y mira que las he tenido oscuras.

El Caso Bárcenas y, sobre todo, el presunto pago en sobres a dirigentes el PP, han hecho explosionar la idea de que "todo el mundo está pringao", de que toda la clase política hiede. Y cuando se está en el Gobierno, esa percepción resulta muy peligrosa porque estamos en crisis y es el Ejecutivo quien exige sacrificios a los ciudadanos.

Pero es que, además, el asunto Bárcenas llega en paralelo a los brotes verdes que se perciben en la economía con una cierta tregua en el coste de la deuda y una balanza de pagos que demuestra, no el gran esfuerzo que ha hecho el Gobierno sino el grandísimo esfuerzo de las familias y las empresas españolas para reducir su deuda y aumentar su productividad.

Y entonces llegó la EPA. El próximo jueves 24, para ser exactos, y será la EPA de los 6 millones de parados. En esas, ya puede prometer que, en 2013 la economía no caerá el 1,3% de 2012 sino algo menos, pero nadie se va a consolar por ello.

Entre corrupción y paro, Rajoy se niega a remodelar el Gobierno. Poco amigo de cambios, el hecho de que Guindos haya logrado evitar la Presidencia del Eurogrupo, cierra el paso a un José Manuel García-Margallo, empeñado en convertirse en el vicepresidente económico del Ejecutivo.

En cualquier caso, De Guindos se ha apresurado a aclarar que el Gobierno no está pensando ni en nuevos recortes ni en nuevos impuestos. Se dice por decir, porque el caso es que las tres grandes partidas de gasto -pensiones, sanidad y educación- no pueden mantenerse en los actuales niveles. Y mejor no hablar del subsidio de paro.

Eulogio López