El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Blázquez, ha salido al paso sobre la polémica fotografía del Presidente Zapatero con el Papa Benedicto XVI. ¿Cómo no va a recibir el Papa al Presidente del Gobierno?, se pregunta. De esta forma, Mons. Blázquez da por sentado no sólo ese encuentro, sino otros que se realicen con otras magistraturas.
La ausencia de dificultades de Mons. Blázquez con la fotografía Zapatero-Benedicto XVI contrasta con la posición de la Santa Sede que observa con cierto recelo el encuentro entre el Papa y Zapatero y que no quieren que el presidente se beneficie de una fotografía sin que al menos la Iglesia le afee los malos gestos con cuestiones que resultan esenciales para la moral. El divorcio express, el matrimonio homosexual y la ley de identidad de género, no parece que sean buenas tarjetas de visita para el encuentro.
Ni una palabra de queja sobre la actitud antifamiliar de este Gobierno, a pesar de que se le hizo una pregunta directa sobre el tema. Tan sólo afirmó que la familia es blanco de contradicción al ser la institución más estimada también por los jóvenes y advirtió que en el 2010 la mitad de los matrimonios serán candidatos para la ruptura con el sufrimiento que comporta sobre los consortes, familiares e hijos. La familia es una sociedad vital, el pilar de la sociedad; la salud de la familia es la salud de la sociedad y también de la Iglesia.