De la Vega dice que hay margen para desplegar aquellos puntos que el TC ha declarado inconstitucionales. Insiste en que el problema no es de fondo, sino de forma, es decir, que se podría desarrollar por la vía de leyes orgánicas. Pero, ¿cómo hacer un consejo de poder judicial catalán cuando la Constitución dice que hay un único consejo de poder judicial y que el sistema judicial es único en la nación catalana?
El Gobierno tiene la solución. Consideran que la sala de gobierno del Superior de Justicia de Cataluña está actuando de facto como consejo de poder judicial. ¿Por ejemplo? Nombramiento de interinos, supervisiones, etc. Así que bastaría con cambiarle el nombre igual que se hizo con la Agencia Tributaria catalana. Cuestiones nominalistas que tanto gustan a los catalanes.