Sr. Director:
No estamos acostumbrando a que el pensamiento políticamente correcto lance sus anatemas contra todo aquello que no encaje con sus dogmas. Uno de los favoritos es la enseñanza separada
Es que el Tribunal Supremo, a través de una sentencia de su Sala Tercera, ha confirmado la legalidad de la enseñanza separada de niños y niñas porque considera que no es una discriminación por razón de sexo que atente contra el principio de igualdad del artículo 14 de la Constitución. La decisión tiene una gran importancia porque permite que los colegios privados que aplican este método educativo se acojan al sistema de conciertos económicos con las administraciones públicas.
Pero es que incluso académicamente la separación de niños y niñas es un criterio ampliamente defendido por los expertos y es tan admisible como el que se basa en la enseñanza mixta. Como hemos comentado, el pensamiento políticamente correcto suele lanzar sus anatemas contra todo aquello que no encaje con sus dogmas. A pesar de que padres y maestros comprueban a diario las notorias diferencias que, en determinados tramos de edad, existen entre un niño y una niña, lo que obviamente repercute en la ordenación de la convivencia académica y en el rendimiento de los alumnos.
Lo importante de la sentencia del Supremo es que el dinero público no sirve de excusa para imponerse a la libertad de enseñanza, hasta el extremo de convertir el derecho de acceso a la educación gratuita en una especie de contrato de adhesión a la ideología imperante.
Jesús D Martínez Madrid
je.do.madrid@gmail.com