Las operadoras continúan lanzando ofertas para seguir ganando cuota de mercado. Es el caso de ONO, que anuncia una nueva velocidad real de navegación de 15 megas. El operador ha hecho la guerra por su cuenta porque se trataba de su propia red de fibra óptica, con el único inconveniente de que, por el momento, la infraestructura llega donde llega.
Quien no ha podido lanzar todas las ofertas que deseaba era Telefónica. Su condición de antiguo monopolio era argumento suficiente para que la CMT frenara el afán competitivo de la teleco y evitar supuestamente un efecto dumping en el mercado.
Pero las cosas están cambiando. Ante la inminencia de las elecciones anticipadas el PSOE colocó a los suyos en puestos solo renovables cada cinco años, como es el caso de las comisiones nacionales (CNMV, CMT, etc.). Por tanto, el que fuera presidente del regulador de las telecomunicaciones pasó a AENA y al frente de la CMT se encuentra Bernardo Lorenzo. Puede que el cambio en la Comisión suponga un nuevo criterio o puede que se considere que los operadores como Jazztel están suficientemente asentados, pero la cuestión es que la CMT abre la mano y permite a Telefónica competir en ofertas con el resto de compañías. El cambio de rumbo debería suponer un impulso para Telefónica España, cuya aportación a los resultados de la matriz era hasta ahora negativa.
Mariano Tomás
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