Regresa el crimen político a Argentina. La combinación de democracia, populismo y anarquía arrastra al país.
Una pelea entre dos grupos sindicales por cuestiones de empleo ha acabado en tragedia. Un joven de 23 años ha fallecido, mientras que otra mujer está muy grave y hay varios heridos leves. En un ambiente de creciente populismo y conflicto ciudadano, pertenecer a uno de los gremios de trabajadores que ostentan el poder laboral en Argentina es importante y conlleva luchas para lograr esos puestos.
Los sindicatos se han ido convirtiendo así en grupos poderosos (casi mafiosos) que tienen en sus manos el poder de decidir quién trabaja y quién no, generándose así una situación de desesperación y conflicto que no se había vivido hasta los últimos años.
Pero mientras tanto, el Gobierno de los Kirchner no hace nada por mejorar esta situación que en medio de la incertidumbre, es el caldo de cultivo para una futura reelección como presidenta.
Andrés Velázquez
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