Rafael Peñafiel, padre de Gregorio Peñafiel, uno de los pilotos heridos en el trágico incidente de las tropas españolas en Afganistán, en el que murieron 17 militares españoles, afirma que, en contra de la tesis del Gobierno Zapatero, de que se trató un accidente, su hijo le contó que había escuchado disparos y que había visto salir corriendo a dos árabes.
Fue una gran exclusiva de Popular TV, pero el ministro más popular del Gobierno, José Bono, movió todos sus hilos para intentar que los medios, especialmente las televisiones, no dieran aire a Peñafiel y este fuera silenciado.
Sin embargo, la Asociación de Militares Españoles le apoyó, y su portavoz, José Conde, afirmó : El Gobierno puede estar tapando o escamoteando la posibilidad de que el helicóptero de los militares españoles en Afganistán hubiera sufrido un ataque.
Pues bien, en la mañana del martes 25, Hispanidad preguntaba al ministro si iba a recibir a Peñafiel, o si iba a tener en cuenta las declaraciones de la Asociación de Militares, que incluso amenaza con irse a los tribunales. Bono se resistió a responder, pero al final sentenció: Nuestro lema es la transparencia, peor los métodos los marcamos nosotros.
Y el que quiera aprender que vaya salamanca, aunque suponemos que no va a abrirse una investigación. Eso sí, habrá que seguir la carrera militar del piloto herido.
