No se trata de hacer números de cuántas confesiones al día podrían producirse, pero la cifra de confesionarios que se han dispuesto en el parque del Retiro para atender espiritualmente a los jóvenes católicos es increíble. Algunos podrán decir que si hay tantos sacerdotes es porque los católicos pecan mucho. Lo que no deja de ser cierto.
Generalmente los católicos, aunque pueden llegar a hacerlo, no nos jactamos de llevar a cabo malas acciones. Gracias a Dios, contamos con el sacramento de la Penitencia -no para pecar más conscientes de que luego nos podemos confesar- sino como ocasión para pedir perdón y tratar de hacerlo mejor en las próximas ocasiones.
Y para ello el Retiro contará con 200 confesionarios que contarán con confesores durante 12 horas al día y a quienes podrán acudir los peregrinos a recibir el sacramento de la penitencia. Además, serán 15 los idiomas en los que se podrán confesar los jóvenes. Esta situación parece que hará del parque madrileño una capital del perdón. Además, por primera vez en la historia de las JMJ, el Santo Padre también se sentará en el confesionario para confesar a un grupo de jóvenes.
Juan María Piñero
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