Por nuestra "desventaja tecnológica relativa" y un "entorno institucional menos favorable"

Mientras nuestro presidente presumía en Nueva York de la fortaleza de la economía española, el BCE dirigía un duro varapalo en su informe "Globalización y competitividad en el área euro". En dicho informe analiza la competitividad de las economías de la eurozona desde la entrada en vigor del euro en 1999. La conclusión es que todas han mermado competitividad en el mundo debido a la relación dólar/euro.

Pero dentro de las pérdidas hay grados. España es el penúltimo de la lista de 12 miembros iniciales de la eurozona. Tan sólo Portugal ha retrocedido más que nosotros. En general, el BCE señala que la productividad está mal y que la zona euro requiere de reformas estructurales. En el caso particular de España, la autoridad monetaria señala que el recorte del 14,3% en la productividad obedece a nuestra desventaja tecnológica relativa y a un entorno institucional menos favorable. Todo un varapalo que desmonta el triunfalista discurso de Zapatero frente a los empresarios de la ‘City'.