Como hemos informado, la Controlaría de la República (una mezcla de fiscalía e intervención general) señaló que la dispensa de la PDD era inconstitucional tanto en los centros de salud como en las municipalidades y las farmacias. El gobierno Bachelet no ha tardado ni un minuto en contrariar el fallo del Alto Tribunal y su correcta Interpretación de la Controlaría para lanzar un decreto que permita la dispensa de la PDD en Chile.
Lo chocante es que el partido liderado por Sebastián Piñera (la oposición a la socialdemocracia que por primera vez puede ganar las elecciones) también se ha sumado a la campaña del Gobierno. Tan sólo una treintena de diputados han votado en contra. Son los siguientes: Álvarez, Arenas, Barros, Bauer, Bobadilla, Cardemil, Correa, Cristi, Cubillos, Chahuán, Delmastro, Diaz, Dittborn, Egaña, Forni, García, García Huidobro, Isasi, Kast, Melero, C.Monckeberg, Nogueira, Norambuena, Olivares, Paya, Recondo, Sabag, Turres, Ulloa, Uriarte, Urrutia, Verdugo, Von Muhlenbrock y Ward. Destacaron en la defensa de la vida desde el momento de la concepción: Kast, Sabag, Melero, Forni y Diaz.
Por el contrario, los incoherentes que votaron contra el primer derecho a vivir fueron: Lily Pérez, Carla Rubilar, Edmundo Eluchans, Alfonso Vargas, Juan Lobos, Juan Masferrer, Pablo Galilea, Rosauro Martínez, Roberto Sepúlveda, Carolina Goic, Felipe Salaberry, Patricio Walter. Otros, tibios, optaron por abstenerse: Hernández y Mulet. Por último, Nicolás Monckeberg ni apareció.
Puede que Piñera piensa que para ganar las elecciones tiene que asumir los planteamientos anti-vida del nuevo Orden Mundial. Se equivoca. La sociedad chilena ha tomado nota.
