El caso de la católica Asia Bibi condenada a muerte en Pakistán después de haber defendido públicamente su fe, es sólo uno de tantos en los que los cristianos allí son acusados falsamente, golpeados, expulsados.
Samuel John, un profesor cristiano de psicología en la Universidad de Peshawar fue golpeado recientemente por unos 20 estudiantes porque rehusó convertirse al Islam. Tres niños cristianos, estudiantes de una escuela de Punjab, fueron ordenados por su maestro a convertirse al Islam; cuando sus padres protestaron, la escuela expulsó a los tres alumnos y las familias tuvieron que emigrar. En Gujrat, dos cristianos fueron arrestados acusados falsamente de robo y asesinato. El líder cristiano Ashfaq Fateh ha señalado que cada vez más mujeres cristianas en Pakistán se suicidan debido a su situación desesperante de pobreza, discriminación, maltrato y la falta de justicia y oportunidades para sus hijos.
En Jhelum la esposa y cuatro hijos del cristiano presbiteriano Jamshed Masih fueron asesinados por una turba dirigida por el líder musulmán Maulana Mahfooz Khan, sin que la policía interviniera. También en Punjab los dueños islámicos de 250 casitas rentadas a cristianos, fueron obligados a desalojarlos por razones religiosas a causa de que la hija de una familia cristiana rehusó acostarse con su patrón musulmán.
Ana Coronado
