Sr. Director:
La semana pasada comenzó la cuaresma. Estamos, por tanto, en días de penitencia. Hoy la propia Vicepresidenta del Gobierno nos lo ha recordado apareciendo en rueda de prensa vestida de morado que es el color litúrgico propio de estas fechas. Por cierto, los distintos tonos morados de sus prendas le favorecían especialmente.
El atuendo cuaresmal ha sido el adecuado para comunicar la penitencia que el Gobierno ha decidido imponernos. Y así, nos ha explicado que han decidido ser magnánimos y, que siendo -como son- amantes como nadie de la vida humana (otra cosa es el aborto), han concedido medidas favorecedoras a uno de los presos que suscita más rechazo en la sociedad.
Dijo también que eran conscientes de que tal medida podía causar controversia pero, a pesar de ello, les habían podido los sentimientos humanitarios.
Es más, ha dicho que "comparten el rechazo social", lo cual me lleva a pensar que hasta se manifestarán, junto con el Partido Popular, en contra de su propia decisión. Sería interesante ver al Gobierno manifestarse contra sí mismo.
La opinión que tiene el Gobierno respecto a la inteligencia de los ciudadanos es francamente pobre.. Por eso dicen que, a pesar de sus explicaciones, nos va a resultar difícil entender su decisión..
Yo creo que la auténtica intención del Gobierno más bien ha sido aplicarnos unas saludables penitencias por nuestros inconfesables pecados. Lo cual está bien y hasta lo merecemos. Ha elegido la penitencia de la humillación.
En tanto, el preso/héroe/vencedor, sin esperar más, ha comenzado a conceder audiencias al personal afín. El tiempo apremia y hay que consensuar acciones y estrategias para el futuro de Euzkalerria. Además su extremo sacrificio bien merece que sea candidato en próximas elecciones, y hay que preparar todo.
Su sufrida novia/compañera/partener le sigue acompañando en el hospital. Al parecer, han tomado gusto a los confortables vis-a-vis hospitalarios.
Es de suponer que, en su decisión por motivos humanitarios, el Gobierno también habrá tenido en cuenta el amor de esta pareja.
Los demás a sufrir que para eso estamos en cuaresma.
Rubalcaba dijo hoy que el marrón era para todos los miembros del Gobierno. Pero, por lo menos la Vicepresidenta presentaba un conjunto impoluto, y sin que se apreciaran signos de haberse manchado con ningún marrón.
En la misma rueda de prensa la señora Vicepresidenta ha condenado la violencia, pero no la de ETA ni la de la kale borroka, sino la sucedida en un estadio de fútbol.
José Luis Múgica
jkmm@wanadoo.es