Álvarez-Cascos es el mejor ministro de Fomento que podíamos tener, porque es un ministro inversor. Prueba de ello es que los aeropuertos de Madrid y Barcelona son los que más van a crecer de toda Europa. Las relaciones entre Iberia y el Ministerio de Fomento, con ellos en su papel de regulador, son excelentes".
De esta forma, salía al paso el presidente de Iberia, Xavier de Irala, del rumor madrileño que presentaba, a un Francisco Álvarez-Cascos empeñado en una sustitución de la Presidencia de la compañía aérea.
La verdad es que es difícil cuestionar a un gestor que acaba de presentar, con cargo al ejercicio 2002, los mejores resultados de la compañía en toda su historia reciente. Quizás el punto más importante de todo el estilo Irala, consistente en el coeficiente de ocupación conseguido, que ya ha alcanzado el 73%, y ello a pesar de un ejercicio como el pasado marcado por el 11-S y donde el uso del transporte aéreo disminuyó.
Por otra parte, Irala citó otras consecuencias provocadas por el señor Bin Laden. Así, el presidente de Iberia afirma que el turismo europeo está abandonando Asia y Oriente Medio, dado que los actos terroristas "han alcanzado a Bali".
De esta forma, consideran en la compañía privatizada que Iberoamérica se afianzará como destino turístico preferido por los europeos. Una última cuestión. Para la renovación de su flota, Iberia apuesta por Europa frente a Estados Unidos. Sus nuevos aviones son Airbus, con motores Rolls-Royce, que irán sustituyendo a los Boeing, con motores General Electric.
