Todo parece apuntar a la existencia de un agotamiento en el crecimiento de la banda ancha en España. Según datos de la CMT, durante el mes de agosto se formalizaron 30.558 altas, 37.487 menos que las realizadas en el mes de julio. "Nos encontramos ante mínimos históricos", señala la Asociación de Internautas, que considera que el descenso va mucho más allá del propio del mes agosteño. En concreto, un 58% más de caída que en el mes de agosto del año anterior en el que se registraron 72.731 altas.
Por eso, la Asociación de Internautas considera que "es necesario el servicio universal para acceder a la banda ancha". ¿Razón? La Comisión Europea advierte que la brecha digital entre España y la UE se agranda. El porcentaje de usuarios de Internet es 8 puntos menor en España (41%) que en la media de la UE, 25 y entre 30 y 45 puntos porcentuales menos que los países líderes de la Unión.
El problema se encuentra en las razones que se alegan para no tener banda ancha: más la falta familiaridad con la tecnología que el precio. No hay un problema de tarifas, sino de cultura. Y en eso las administraciones públicas tienen mucho que decir.