- Pierde 41 millones de euros en el primer trimestre y aumenta la deuda hasta los 777 millones.
- Y ojo, porque el nivel de apalancamiento es elevado: 4,8 veces el ebitda.
- Y su generación de caja no permite pagar la deuda.
- La operadora descarta repartir dividendo en 2017 y 2018. Lógico.
- A pesar de todo, los títulos de la teleco han subido un 1,3% en su estreno bursátil.
Másmóvil se ha convertido este viernes en la primera empresa que da el salto del
Mercado Alternativo Bursátil (MAB) al Mercado Continuo. Y lo ha hecho, además, con subidas. A tres horas del cierre de la sesión,
los títulos de la operadora suben un 1,3%, después de caer más de un punto nada más estrenarse.
Pero lo más significativo de la salida a Bolsa ha sido la publicación (por fin) de la
cuenta de resultados del primer trimestre. Los datos dejan al descubierto la realidad de la compañía: pérdidas de 41 millones de euros y
una deuda que asciende, tras la compra de
Yoigo y Pepephone, a 777 millones, lo que lleva a un apalancamiento de 4,8 veces el ebitda. Demasiado.
Ahora bien, lo más preocupante, según algunos analistas, es que
su capacidad de generación de caja actual no permite pagar la deuda. En otras palabras, si el Ceo,
Meinrad Spenger, y su equipo no da la vuelta a la situación, el modelo no es sostenible.
Con estos fundamentos, la compañía, cuyo máximo accionista es el fondo Providence (17%), que dirige
John Hahn, ha señalado que no repartirá dividendo en 2017 y 2018. Lógico. De hecho, no habrá retribución
hasta que el apalancamiento no se reduzca hasta situarse en 2,7 veces el ebitda.
A pesar de todo, los títulos de Másmóvil han subido alrededor del 1,3% en su estreno bursátil. Es el triunfo del modelo John Hahn:
poco beneficio, mucha deuda… y al pelotazo.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com