Montero recupera los campos de reeducación de Mao Tse Tung... para que los funcionarios utilicen lenguaje no sexista y superen los estereotipos que afectan negativamente a las personas LGTBI+
Irene Montero no frena en su avance hacia la Igualdad. Y si para ello tiene que utilizar la reeducación, como hiciera en su día el dictador comunista chino Mao Tse Zung -utilizando unos campos de reeducación en los que murieron 78 millones de personas-, pues, adelante. Ahora, el Gobierno “reeducará” a los funcionarios con clases de lenguaje no sexista y diversidad LGTBI. Y esto ¿qué significa?: por ejemplo, enseñar a los funcionarios a utilizar un lenguaje inclusivo -el todos y todas-, formarles en feminismo o el aprendizaje en “diversidad afectivo sexual y LGTBi” como condiciones básicas para el funcionario del futuro en España. Irene, eres genial.
? Publicamos el I Plan de Formación en igualdad y no discriminación 2020 – 2022
— Instituto Nacional de Admón. Pública (@INAP_ES) June 15, 2020
ℹ️ 15 actividades abiertas para empleadas y empleados públicos de las AA. PP.
? Colaboran la DG de función Pública @territorialgob @IgualdadGob y @VSocialGob
? https://t.co/iGGsJxIu1c pic.twitter.com/AJoqyi3IFY
En el primer bloque se incluyen nociones básicas sobre discriminación racial así como una amplia formación en realidad afectivo-sexual y personas LGTBI+. Al finalizar el programa los empleados públicos -atentos a este punto- sabrán detectar situaciones de vulneración del derecho a la igualdad, delitos de odio y discriminación por razón de orientación sexual o identidad de género y deberán haber superado los estereotipos que afectan negativamente a las personas LGTBI+. Es decir, los funcionarios se formarán para ser delatores de la ciudadanía en estos aspectos. Lo que haga falta para lograr “la integración de la dimensión LGTBI+ en las políticas públicas”.
Asimismo, los empleados deberán conocer conceptos y definiciones de este colectivo, estudiar la legislación que los ampara y utilizar un lenguaje inclusivo y no discriminatorio.
En el segundo gran bloque, la formación irá destinada a la igualdad entre hombres y mujeres. Aquí los empleados públicos deberán estudiar “Historia del feminismo en el mundo y en España”, cómo aplicar la perspectiva de género en la Administración pública o el adecuado uso del lenguaje no sexista o discrimatorio.