Javier Valle, consejero director general de VidaCaixa, ha logrado aumentar el beneficio a pesar de la caída de las primas
El beneficio neto de Vidacaixa se redujo un 8,5% hasta junio y no superó los 321,4 millones de euros debido al impacto del confinamiento por el coronavirus. El volumen de primas y aportaciones registró una caída del 15,9%, hasta los 4.485 millones de euros debido, principalmente, a la contracción de la actividad comercial durante los meses de abril y mayo.
La peor parte se la llevó el negocio de ahorro, que se desplomó un 19,8% y, más concretamente, el negocio de ahorro individual, que cayó un 24%, según la nota publicada este martes por la aseguradora. Los seguros de vida, especialidad de VidaCaixa, tampoco escaparon a la crisis y redujeron las primas un 13,9%, hasta los 3.471 millones de euros.
Más tranquilizadora fue la evolución del negocio de riesgo, que creció un 15,6% respecto a junio de 2019, y el volumen de recursos gestionados, que aumentó un 4,5%, hasta los 92.497,4 millones de euros. Pero cuidado, porque este crecimiento se debió a la actividad previa al coronavirus. Habrá que ver cuál es la evolución durante la segunda mitad del año.
En cualquier caso, el seguro de vida sigue siendo el motor de la compañía con 55.097 millones de euros del total de los recursos gestionados. Le sigue los planes de pensiones y EPSV (29.926,5 millones) y los BPI Vida y Pensiones (7.473,9 millones).
A pesar de la caída del volumen de primas, VidaCaixa sigue liderando los seguros de vida y planes de pensiones, con una cuota del 31,9% del total de primas y un 26% del total de patrimonio acumulado en planes de pensiones.