Un profesor de los Países Bajos, de nombre Theo Boer, ha escrito un artículo sobre las estadísticas de suicidios en aquel país. El autor es de fiar, pues fue miembro de un Comité Regional de Revisión de la Eutanasia en los Países Bajos durante 10 años.

El artículo lo recoge y traduce One of Us. Como conclusión principal, esta: la legalización de la eutanasia, lejos de disminuir los suicidios, los aumentó.

Pero su análisis es aterrador y nos sirve para lo que se nos avecina en España con la aprobación de la eutanasia: “Muchos activistas consideran la legalización de la eutanasia para pacientes terminales simplemente como un trampolín hacia una mayor liberalización. Tomemos a Canadá como ejemplo. Poco después de que se legalizara la eutanasia en 2016, los promotores del derecho a morir impugnaron la limitación a los enfermos terminales. No sin éxito: en 2019, el Tribunal Superior de Quebec dictaminó que tal limitación es «inconstitucional» y que la eutanasia debería estar disponible para cualquier paciente, independientemente de su esperanza de vida. En cuanto a los Países Bajos, se está abriendo paso en La Haya un proyecto de ley para miembros privados que extendería el asesinato a cualquier persona de 75 años o más”.

En el fondo, esto es lo que quieren Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para España…