Esta vez en Europa, desde Bruselas, Pedro Sánchez se pone serio, muy serio, y asegura que allí, en el corazón de la UE, no se entiende que Ciudadanos pacte con un partido de ultraderecha.

Lo dijo justo el mismo día en el que su partido pactaba, para obtener el poder, con Podemos, nada menos que en Canarias, Balares, Rioja y Aragón. Y en Navarra, además, ha pactado con los proetarras de Bildu.

Pero lo que no se entiende en Europa es lo de Vox. Al parecer, el partido de Santiago Abascal es de ultraderecha mientras Podemos es de centro izquierda moderado. Y Bildu o ERC: bueno pueden ser leninistas, pero muy democráticos.

Y si Europa, y Pedro Sánchez, aceptan a Bildu y a Podemos y a ERC, pero no a Vox, es porque Vox es, y en esto insitiré siempre, lo único que está prohibido ser en la España o la Europa de hoy: cristiano.