• La multinacional creada por Walt Disney ha conversado con el estudio de cine de Rupert Murdoch.
  • Y aunque el diálogo activo ha acabado, se podría volver a abrir: a los dos gigantes les interesa unir fuerzas.
  • Así, podrían hacer frente a Netflix y a Prime (Amazon), los reyes del servicio de transmisión de vídeo.
  • Es más, Disney está preparando su propio 'Netflix', tras romper con la empresa de Reed Hastings.
  • Claro que en la factoría de Walt Disney parece que faltan ideas: lanzará nueva trilogía de Star Wars y versión real de El Rey León.
Hace unos días, se conocían contactos entre The Walt Disney Company y 21st Century Fox. Esto no es baladí, pues deja entrever extraños compañeros de cama para hacer negocio, ya que ideológicamente están en polos opuestos (uno es muy progre y otro, conservador)… Pero ¿podrían acabar juntos? Es una posibilidad, además, cosas más raras se han visto. La multinacional creada por Walt Disney ha tenido conversaciones preliminares con el magnate Rupert Murdoch cpara comprar algunos activos de este último. En concreto, el estudio de televisión y películas Fox, el canal por cable FX y una participación del sistema de emisión en línea Hulu, como ha informado The New York Times. Y aunque ahora, el diálogo activo ha acabado, se podría volver a abrir porque a los dos gigantes les interesa unir fuerzas. Así, podrían hacer frente a Netflix y a Prime (propiedad de Amazon), que son los actuales reyes del servicio de transmisión de vídeo por Internet. Es más, Disney está preparando su propio 'Netflix', tras romper su acuerdo con la empresa de Reed Hastings hace unos meses. Claro en que en la factoría de Walt Disney parece que últimamente faltan ideas. Por ejemplo, ha anunciado que va a lanzar una nueva trilogía de Star Wars, cuando acabe la que ahora tiene pendiente (el Episodio VIII se estrenará el próximo 15 de diciembre y el IX podría llegar a los cines el 20 de diciembre de 2019), y está trabajando en la primera serie con actores reales de la franquicia, según la web Gizmodo. Además,  prepara una versión con personajes de carne y hueso de El Rey León para estrenar en el verano de 2019, tras los éxitos obtenidos recientemente con Cenicienta, El libro de la selva o La Bella y la Bestia. Es decir, por tanto, sus nuevos proyectos se pueden resumir en más guerra de las galaxias y versiones humanas de sus clásicos animados. Por cierto, hablando de El Rey León, conviene recordar que esta película supuso un antes y un después en la historia de Disney, pues empezó a huir del sentido de la trascendencia como de la pólvora, y además, optó por el panteísmo e incluso en algunas de sus creaciones prohibió citar la palabras dios. Algo que no ha ido a mejor: ahora también es una de las mayores organizaciones pro-gay. Y en todo esto ha influido Robert Iger, que procedía de la compañía Capital Cities/ABC, (adquirida por Disney en 1996); de ahí fue escalando a la división internacional, en el 2000 a la presidencia y en el 2005, al sillón de Ceo. Por último, conviene echar un vistazo a los resultados del último ejercicio fiscal de Disney presentados recientemente: el beneficio neto ha caído un 4,4%, hasta los 7.708 millones de euros. Por su parte, la facturación ha sido de 47.319 millones (-0,9%) por los menores ingresos del negocio de televisión de cable, la caída en la división de películas (-11%) y también la pérdida de suscriptores del canal deportivo ESPN; mientras, los ingresos del negocio de parques temáticos subieron un 8%. Cristina Martín cristina@hispanidad.com