La Ley de Cambio Climático y Transición Energética sigue estando en proyecto, a pesar de que iba a ser “de consenso”, como presumía su impulsora, Teresa Ribera, y urgente ante la “emergencia climática” que afrontamos. Sin embargo, ahora se paraliza y la excusa oficial es el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2021.

Vayamos por pasos. El pasado 10 de febrero, el Departamento que dirige la vicepresidenta cuarta y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico presumía de que el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética (APLCCTE) entraba en la recta final de su tramitación parlamentaria. Tras haberse sometido a información y audiencia públicas e incorporar alegaciones, se enviaba al Consejo Asesor de Medio Ambiente (CAMA) -órgano de encuentro entre Estado y sectores sociales y económicos relevantes para el medio ambiente- para tomarlo en consideración y después se trataría en Conferencia Sectorial con comunidades autónomas y también en el Consejo de Estado.

Entre el coronavirus y el confinamiento, el Consejo de Ministros no aprobó el anteproyecto de ley hasta el 19 de mayo, pasando a ser proyecto de ley... y el plazo de presentación de enmiendas empezó el 29 de mayo, pero ¡acabó el 14 de octubre!

El siguiente paso era la remisión al Consejo de Ministros, pero entre medias llegó con fuerza la pandemia del coronavirus y el confinamiento del país. El Consejo de Ministros no aprobó el citado anteproyecto de ley hasta el martes 19 de mayo, paso imprescindible para el inicio de su tramitación parlamentaria. Ahora ya como proyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética (PLCCTE) entró al Congreso de los Diputados el 20 de mayo, se calificó seis días después y se publicó en la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico hasta el 29 de mayo. Desde esta última fecha se abrió el plazo para presentar enmiendas hasta el 16 de junio, pero el mismo se ha ampliado nueve veces, cerrándose finalmente el 14 de octubre. Y un día después se inició el periodo para que la citada comisión parlamentaria elabore su informe. Y ojo, entonces, ya empezaban a cobrar mucha fuerza los rumores de que el Gobierno preparaba su proyecto de ley de PGE de 2021, que finamente se ha aprobado en el Consejo de Ministros del pasado martes 27, iniciando así su tramitación parlamentaria.

Entre las 758 enmiendas presentadas, el PNV pide que abogue por la neutralidad tecnológica, como defienden algunas empresas (Repsol o Endesa) y ojo, el proyecto de ley no habla nada del hidrógeno

Volvamos a la PLCCTE. Recuerden que iba a ser una ley “de consenso”, como decía Ribera, pero más bien parece una de disenso. ¿La razón? En total, se han presentado 758 enmiendas de todos los partidos políticos (incluidos PSOE y Unidas Podemos, miembros del Gobierno de coalición que preside Pedro Sánchez), según recoge el Boletín oficial de las Cortes Generales del 28 de octubre. Pero también hay enmiendas de algunos de sus principales socios -los independentistas y el PNV-: este último pide que el proyecto de ley abogue por la neutralidad tecnológica, es decir, que defienda la existencia de un mix de tecnologías y energías, postura que también han defendido algunas empresas energéticas (como Repsol o Endesa, por ejemplo). Asimismo, el proyecto de ley no habla nada del hidrógeno, a pesar de varios hechos relacionados con esta energía:

  • El pasado 6 de octubre, el Consejo de Ministros lanzó el Plan “Hoja de Ruta del Hidrógeno: una apuesta por el Hidrógeno Renovable”, donde se recoge el objetivo de llegar a 4 gigavatios (GW) de potencia instalada de electrolizadores.
  • “El desarrollo del hidrógeno renovable incentivará la creación de cadenas de valor industrial innovadoras en España, el conocimiento tecnológico y la generación de empleo sostenible, contribuyendo a la reactivación hacía una economía verde de alto valor añadido”, subrayó José Luis Cabo, subdirector general de Hidrocarburos y Nuevos Combustibles del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en un webinar organizado por la patronal eléctrica (la Asociación de Empresas de Energía Eléctrica -AELEC-, antes UNESA) el 14 de octubre.
  • Están surgiendo muchos proyectos de hidrógeno renovable (también llamado hidrógeno verde) por parte de distintas empresas: Repsol, Iberdrola, Endesa, Naturgy y Enagás, entre otras muchas. De hecho, el pasado jueves, el CEO de Endesa, José Bogas, ha defendido que la industria española tendría que tomar posiciones en actividades, como el hidrógeno verde, “que abarcan, crean y abren mundos tecnológicamente distintos”.

Todo esto refleja que la PLCCTE no tiene consenso y que parece que ya no es urgente… Ahora a Ribera le interesan más los PGE que su ley contra la “emergencia climática”. Y no se puede olvidar que nos está saliendo bastante cara por todo lo relacionado con el Castor