En este contexto de crisis mundial del automóvil, del que ya todos hablan pero del que Hispanidad viene dando cuenta desde hace tiempo, decíamos que Ferrari venía siendo una excepción en sus resultados, pero esto se ha acabado hace unos días, cuando ha rebajado sus previsiones anuales, lo que provocó un frenazo en bolsa del 15%. El anuncio de dicho profit warning se dio después del anunciado por BMW, que no fabrica nada en nuestro país pero sí vende… como hacen la mayoría de las marcas asiáticas. Y ojo, porque desde allí sigue creciendo la colonización china de España a través de MG, BYD, Omoda, Jaecoo… y ahora también en Ebro EV Motors y Santana.
El fabricante italiano de coches deportivos de alta gama, también conocido como Il Cavallino Rampante, ha anunciado que sus beneficios ajustados cerrarán el año en 2.720 millones, lo que supone un ritmo de crecimiento más lento del que pronosticó en el Capital Markets Day en 2022. Claro que la rebaja de previsiones va más allá de los resultados… y también afecta a la electrificación: ahora estima que sólo un 20% de sus vehículos serán 100% eléctricos en 2030, y no el 40% que anunció hace unos años, justo cuando acaba de presentar el que será su primer modelo eléctrico (el Elettrica) y que se pondrá a la venta a finales de 2026. Eso sí, el 80% restante se repartirá entre vehículos de combustión (40%) e híbridos (otro 40%).
La transición hacia el eléctrico es una asignatura pendiente del sector y está costando más de lo que se pensaba por su costosa producción, su elevado precio de venta y su baja demanda. Esto lo conoce bien el primer accionista de Ferrari, la familia Agnelli (a través del vehículo inversor Exor), pues también ocupa dicha posición en otros grupos del sector, como: Stellantis (que surgió de la fusión del francés PSA y el italo-estadounidense Fiat Chrysler Automobiles en enero de 2021), el fabricante de vehículos agrícolas CNH Industrial e Iveco (que ya sólo hace camiones y autobuses, tras haberse desprendido de su división de furgonetas a la india Tata Motors y la de blindados a la italiana Leonardo y la alemana Rheinmetall).
Las rebajas de previsiones de Ferrari y BMW no han sido las únicas del sector, también se han visto en Stellantis y Renault, y la mayoría de las marcas han ido retrasando sus planes de electrificación. En esto último, China ha sabido aprovechar la ventaja de contar con una fuerte presencia en los minerales críticos y en el desarrollo de las baterías para los vehículos eléctricos, algo que la Unión Europea trata de contrarrestar con aranceles desde hace un año, pero no sirve de mucho. Por ejemplo, en España sigue creciendo la colonización de las marcas chinas, destacando: MG (que en los últimos meses ha entrado en el ranking de las diez más vendidas), con 35.264 unidades (+61%); BYD, con 16.617 (578%); Jaecoo, con 6.836 (+4.890%); Omoda, con 9.390 (+90%); y Xpeng, con 454 (+4.027%); entre otras, según los datos de matriculaciones en los nueve primeros de meses difundidos por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Otra muestra de dicha colonización china se puede ver en alianzas, como la que ha hecho resurgir a la marca Ebro bajo el nombre Ebro EV Motors (donde el grupo chino Chery es dueño del 40%) o la que se ha creado para que vuelva la marca Santana Motors, teniendo como socios a los chinos Anhui Coronet Tech y Zhengzhou Nissan Automobile (ZNA) -empresa conjunta del grupo japonés Nissan y el chino Dongfeng- y Anhui Coronet Tech.
En el entretanto, en este contexto de crisis, hay algunos signos para el optimismo. Las marcas SEAT y Cupra (que forman parte SEAT S.A.) y Skoda han logrado crecimientos de ventas en el tercer trimestre, elevando las del grupo Volkswagen a 2,199 millones de unidades (+1%). En concreto, SEAT (con la marca del mismo nombre y la premium Cupra) ha vendido 136.900 unidades entre julio y septiembre, un 9,8% más que hace un año; y la checa Skoda, 256.300 unidades, un 15% más. En el conjunto de los nueve primeros meses, el grupo Volkswagen ha vendido 6,6 millones de vehículos (+1,2%), destacando 671.300 (+14,1%) de Skoda y 439.500 (+4,1%) de SEAT/Cupra. Quizá el buen desempeño de las dos marcas de SEAT ha contribuido en el nombramiento del alemán (y con ascendencia española) Markus Haupt como CEO definitivo de SEAT S.A., cargo que ocupaba de forma interina desde el pasado 1 de abril, tras la sorprendente salida de Wayne Griffiths.
Por su parte, Stellantis ha vendido 1,3 millones de unidades en el tercer trimestre, un 13% más que hace un año, gracias en gran medida a Norteamérica, donde invertirá más. Quizá por esto, en dicha zona, ha anunciado que invertirá más dinero (en concreto, 8.600 millones)... quizá para afrontar mejor los aranceles impuestos por EEUU. Además, el CEO de Stellantis, Antonio Filosa, también ocupa el cargo de responsable del grupo en Norteamérica.