El 25 de agosto se realizó frente al capitolio de California (Estados Unidos), la primera Marcha por la Vida en el estado para exigir que se defienda la vida desde la concepción hasta la muerte natural, recoge Aciprensa. 

Se han llevado a cabo grandes eventos a favor de la vida en varias ciudades importantes de California. Por ejemplo, la caminata provida 'Walk for Life West Coast' se realiza en San Francisco durante 17 años, mientras que OneLifeLA se realiza en Los Ángeles desde el año 2015.

En el encuentro participaron la presidenta del Fondo de Educación y Defensa de la Marcha por la Vida, Jeanne Mancini; el presidente del California Family Council, Jonathan Keller; el asambleísta James Gallagher; los senadores provida Brian Jones y Shannon Grove; la directora ejecutiva del California Alliance of Pregnancy Care, Allison Martinez; el líder de Destiny Christian Church, Greg Fairrington. También asistieron líderes jóvenes como la coordinadora regional de Students for Life Northern California, ​​Lea Kalinowski; los directores ejecutivos de Pro-Life San Francisco, Kristin Turner; de Right to Life Central California, John Gerardi; y de Right to Life Kern County, Marylee Shrider.

Celebrar el regalo de la vida de Dios, desde la concepción hasta su final natural. Volvamos a comprometernos con la libertad y la justicia para todos, nacidos y no nacidos

El evento fue conducido por Keller, quien declaró que “a pesar de la reputación progresista de California, cuando se trata de tratar cada vida humana con dignidad y respeto, nuestro Golden State tiene un historial empañado”. Frente a ello, recordó que la marcha busca “celebrar el regalo de la vida de Dios, desde la concepción hasta su final natural. Volvamos a comprometernos con la libertad y la justicia para todos, nacidos y no nacidos”.

Por su parte, Greg Farrington, pastor de la Iglesia Cristiana Destiny, dijo que “la peor pandemia en América es el aborto” y lamentó los seis millones de bebés que fallecieron dentro del vientre materno a causa del aborto en el país. Además, afirmó que la comunidad tiene la responsabilidad “de no hacer más silencio” sobre esta tragedia; y rezó a Dios para que los senadores empiecen a seguir a la ciencia y dejen de “legislar la muerte”.

Se da la circunstancia de que esta iniciativa provida tiene lugar en el momento en que la Administración del nuevo presidente, Joe Biden, ha anunciado su intención de promover el aborto dentro y fuera del país con todo tipo de recursos y fondos.