Objetivo: sensibilizar a los más jóvenes para prevenir los accidentes de tráfico porque, entre otras consecuencias, las lesiones causadas por el tráfico, según la OMS, son ahora la principal causa de muerte de niños y jóvenes de 5 a 29 años. El documento de la Organización Mundial de la Salud 'Diez Estrategias para Preservar la Seguridad de los Niños en las Carreteras' trata de dar respuesta a datos tan preocupantes como que un niño muere prematuramente cada cuatro minutos en alguna carretera del mundo.

A pesar de estas cifras tan negativas, las iniciativas para potenciar la seguridad vial entre los más jóvenes se multiplican. Iniciativas para que los niños de todo el mundo puedan caminar, jugar y aprender de manera segura allí donde residan, además de procurar que todos los menores se conviertan, en unos años, en conductores y peatones más responsables.

El proyecto Rights of Way se puso en marcha en 2017 y en Jamaica y Filipinas ya ha ayudado a más de 267.000 niños de 65 escuelas

En esta línea, la Fundación Abertis y Unicef promueven el proyecto Rights of Way, pionero en paliar las secuelas causadas por los accidentes de tráfico, especialmente en niños y en los países con más índice de pobreza.

FundaAbertis

Este proyecto, que se puso en marcha en 2017 y que se desarrolla en Jamaica y Filipinas donde ya han ayudado a más de 267.000 niños de 65 escuelas, ha llegado también a Brasil, concretamente a zonas de alta vulnerabilidad de São Paulo y Rio de Janeiro. En ambas ciudades (las dos mayores del país), niños y adolescentes se enfrentan a diario a la falta de opciones seguras de transporte, lo que les lleva a sufrir discriminación, violencia y mala información.

Asimismo, y habitualmente, también se encuentran problemas infraestructurales, como la falta de aceras, alumbrado insuficiente o la inexistencia de zonas de velocidad reducida.

Está previsto que el programa involucre directamente a 210 adolescentes, quienes colaborarán con el diagnóstico y mapeo de los problemas que encuentran a diario para llegar al colegio, acceder a los centros de salud y, en general, moverse en su vida cotidiana. Todas estas experiencias previas se analizarán en una serie de talleres que elaborarán planes de trabajo con soluciones que, una vez implementadas, podrán llegar a mejorar la vida de cerca de 4.000 personas.

Y aquí en España, promover una movilidad segura es lo que persigue el concurso educativo ‘Jóvenes y Movilidad, que convoca desde el año 2007 el RACC junto con el Servei Català de Trànsit (SCT). Dirigido a los adolescentes, se acaba de abrir el pasado mes de noviembre la convocatoria de la 14ª edición, que busca en esta ocasión ideas para mejorar la seguridad vial del entorno de los centros educativos.

Racc2

Bajo el lema Protegidos en la escuela, ¿cómo protegemos también la movilidad de su entorno?, en esta edición se invita a los jóvenes a reflexionar sobre los desplazamientos que hacen para asistir a las escuelas e institutos.

Otro de los efectos negativos que puede provocar la falta de seguridad vial es el impacto socioeconómico de los accidentes de tráfico

El premio al Mejor Proyecto Educativo en Movilidad Segura reconocerá las actividades que realizan los centros regularmente durante el curso escolar para promover esa ‘movilidad segura’.

También la Asociación Stop accidentes lleva trabajando este sentido durante muchos años. La Asociación de Ayuda y Orientación a los afectados por accidentes de tráfico organiza talleres para la prevención destinados a los alumnos de centros escolares. “A través de actividades teorico-prácticas incorporamos dinámicas de grupo que permiten un auto aprendizaje a través de la comunicación y la participación activa”, explica en su web.

StopMapfre

Pero, además, Stop accidentes y la Fundación Mapfre convocan el concurso ‘Ahora vamos andando’ centrado en fomentar los comportamientos seguros en el camino escolar. En concreto, el certamen (que cumple ya su tercera edición) está dirigido a alumnos de 3º a 6º de primaria que deberán escribir una carta o hacer un dibujo con el que ofrecer consejos a su entorno familiar, a su municipio y a la población en general sobre seguridad vial.

El coste socioeconómico de los accidentes sufridos por niños

Otro de los efectos negativos que puede provocar la falta de seguridad vial es el impacto socioeconómico de los accidentes de tráfico, especialmente los que involucran a grupos vulnerables como los niños. El estudio internacional de la London School of Economics and Political Science (LSE) realizado por iniciativa de la Fundación Abertis concluye que el coste socioeconómico anual de los accidentes de tráfico sufridos por niños en los ocho países analizados en el estudio (Francia, España, Italia, Chile, Brasil, Argentina, Puerto Rico e India) asciende a 21.800 millones de dólares (19.600 millones de euros).

La Asociación de Ayuda y Orientación a los afectados por accidentes de tráfico organiza talleres para la prevención destinados a los alumnos de centros escolares

El Dr. Alexander Grous, profesor e investigador de la LSE y autor del informe, explica que con este informe “profundizamos en el detalle de los costes de la atención médica y psicológica, la rehabilitación y el cuidado de los menores en casa, los cuales pueden tener un grave efecto en la salud mental de los niños afectados, pero también de sus familias”.

El estudio señala además las medidas que se pueden adoptar para reducir la tasa de mortalidad en países con diferentes niveles de riqueza y que pasan, entre otras, por infraestructuras de carreteras nuevas y mejoradas, campañas educativas dirigidas a los niños y a la comunidad, y la aplicación de sanciones.