Sr. Director: Hace unos días leía que Pedro Gómez, presidente de ASAJA Cantabria, "ve inaceptable la postura de Podemos respecto al lobo y la considera un insulto al mundo rural". "Estamos viendo cómo ganaderos de toda Cantabria están sufriendo las lobadas de primavera, vemos la controversia que está generando el Plan de Gestión del lobo y, por si fuera poco, Podemos lleva al Congreso la protección de este depredador". Recordemos que en estos momentos el lobo representa un grave problema en Castilla y León (sólo en Zamora hay más lobos que en Francia y Alemania juntas)  y es problemático en comunidades colindantes. Gómez manifestaba que ASAJA Cantabria ha dejado muy claro que a los ganaderos hay que pagarles los expedientes atrasados y que al lobo hay que controlarle con batidas y esto se seguirá haciendo si el lobo es especie no cinegética. De hecho, en el borrador del Plan se expone en un apartado la ejecución de batidas y "hemos insistido en que no hay otra manera que no sea mediante controles poblacionales. A los ganaderos nos tienen que pagar y la Administración tiene que abatir lobos para asegurar una coexistencia más o menos llevadera con esta especie tan polémica. Este punto lo hemos reiterado en todas las mesas del lobo celebradas: especie cinegética sí, pero batidas también", concluía el presidente. Aunque haya quedado sin efecto la propuesta de Podemos al Congreso, si nos gustaría saber cómo este partido pretende solucionar este problema: ¿está por los ecologistas o por los ganaderos? Domingo Madrid