Sr. Director: Se han puesto de moda las burlas y las ofensas contra los católicos. Da la sensación de que para ser conocido, famoso y conseguir ese momento de gloria, sea imprescindible ofender a los creyentes. Ahora toca el turno a un monologuista de Castellón. Se ha anunciado en el municipio de Nules la representación de un monólogo en clave de humor, en el que los cristianos son objeto de burla. Muchos vecinos de Nules no han parado de mostrar su disconformidad. "El propio cartel anunciador es una provocación y su autor ya ha dado muestras sobradas de que tiene la costumbre de burlarse de los católicos, como parte importante de su ironía y de su humor", cuenta un vecino. Algunos vecinos han dirigido sus quejas  al Ayuntamiento, puesto que patrocina la obra de teatro. Desde el consistorio le han quitado importancia, alegando que "es sólo una obra cómica". El alcalde ha llegado más lejos al afirmar que "esta actuación se enmarca dentro de la libertad de expresión: quien quiera asistir, que vaya y pague la entrada". Me pregunto ¿Por qué X Castillo en vez de provocar a los católicos no provoca a los musulmanes? ¿Lo aprobaría el ayuntamiento? ¿Supongo que consideran sería un acto de la libertad de expresión? ¿No les parece que ya es hora de respetar la libertad de los demás? J. Mez Madrid