Sr. Director:
La libertad religiosa, según la define el Concilio Vaticano II, significa que "no se obligue a nadie a actuar contra su conciencia ni se le impida que actúe conforme a ella, pública o privadamente, solo o asociado con otros, dentro de los límites debidos".
Se trata de una formulación en plena consonancia con la Declaración universal de los derechos humanos que los obispos recogen en su nueva instrucción pastoral, "Jesucristo, salvador del hombre y esperanza del mundo".
Lo hacen alertados por los intentos en España, desgraciadamente aparecen casos casi a diario, de reducir la fe a "la esfera privada e interior de las personas", en lo que consideran una clara vulneración de un derecho fundamental.
Jesús Madrid
Dile a los jueces y juezas... Vicente Vallés, ejerciendo de feministo
14/12/24 15:00