Sr. Director: Acciones comunes para proteger las fronteras exteriores, sí. Pero si toca hablar de reparto de refugiados la cosa se pone más complicada. Así se comprobó durante la reunión de ministros de Justicia e Interior celebrada en Luxemburgo que ha tenido lugar durante la segunda semana de octubre, mientras los responsables de Exteriores de Alemania, Francia e Italia discutían el asunto en Roma. La parte positiva es que Europa afronta por fin la necesidad de una nueva regulación, dado que el sistema de Dublín resulta ineficaz en una crisis como la actual. Las propuestas presentadas en mayo por la Comisión, sin embargo, se han topado con un fuerte rechazo que no se limita a los países del Este, sino también a algún otro, encantado de ver cómo Polonia o Hungría hacen el trabajo sucio. Enric Barrull