Sr. Director:
No parece que el nuevo Gobierno socialista tenga mucho margen para incrementar la recaudación fiscal fuera de cargar de impuestos a las clases medias asalariadas. Al menos, así se desprende de las propuestas de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que, al pretender incidir fiscalmente en los beneficios empresariales, las operaciones bancarias y los impuestos sobre los combustibles, sólo obtendrá retraimiento de la actividad económica, restricciones al crédito y caída de la competitividad. Así las cosas, nos preguntamos ¿Es ese el camino?