Sr. Director:
En los primeros días del año asistimos consternados al inicio de una declaración de guerra abierta entre dos civilizaciones.
Sin embargo, los políticos de turno, a pesar de haber tenido que modificar sus agendas para asistir a precipitadas reuniones sobre terrorismo, continúan con sus propagandas y discursos vacíos. Unos cuantos muertos, un poco de sangre, pero, según ellos, no hay motivo para preocuparse porque estamos en buenas manos. Tenemos el tsunami encima, pero según los maestros ciruela podemos seguir plácidamente tomando el sol en las hamacas entre sorbo y sorbo de arakiry -que no harakiri-, porque gracias a ellos todo está bajo control.
No sé muy bien si debo decir choque de civilizaciones según lo plantean Toynbee o Huntington o si aludir al famoso Caballo de Troya -aunque pensándolo bien, las dos ideas son compatibles-, citado en 'La Odisea' y ampliado en 'La Eneida'. No estaría de más releer a los clásicos e incitar a nuestros niños y adolescentes a hacerlo -mucho mejor nuestras epopeyas y hazañas bélicas de siempre que los ninja, vampiros y demás tropa deformante-.
Pero también, y más prioritario es releer y meditar palabra a palabra, frase a frase, el discurso que el entonces papa Benedicto XVI y hoy pontífice emérito pronunció el 12 de septiembre de 2006 en la Universidad de Ratisbona -de donde había sido catedrático-:"Una nueva relación entre fe y razón para permitir el diálogo entre cultura y religiones".
El Papa en esa ocasión, aparte de criticar el laicismo beligerante de nuestra sociedad actual, amenazada por la aversión a los interrogantes fundamentales de su razón, habló del diálogo entre culturas haciendo uso de las palabras del profesor y teólogo libanés Adel Theodorn Khoury, autor de la mejor traducción del Corán al alemán, y más en concreto al "séptimo coloquio", una charla entre el emperador bizantino del siglo XIV, Manuel II, y un persa culto, sobre los valores del cristianismo y el islam y la verdad de ambos, recogido en la obra 'Conversaciones con un musulmán'.
Xus Madrid