Lo cuenta Religión en Libertad:
Una de las mujeres que recurrió al químico casero en Inglaterra contó su propia historia a SPUC, ante la preocupación “por haber cruzado la puerta del aborto casero”.
“Salían grandes trozos de mí. Rompía a llorar en la ducha porque salían trozos de mí. Era absolutamente horrible”, explica Sophie a la asociación provida. “Sé que [el aborto casero] no le afecta de la misma manera a todas las mujeres, pero la mayoría estarán de acuerdo en que no es agradable ver esto salir de ti”.
Desde entonces, la joven repite una y otra vez que no quiere que nadie sufra como ella lo hizo el día de su aborto.