El diputado Oskar Matute (en la imagen), de Bildu, no es un Oskar cualquiera porque es un Oskar con 'k' de kilogramo. El miércoles, durante la sesión de control, incurrió en el error en el que incurren aproximadamente 9 de cada diez nacionalistas: aseguró que él sólo representaba a los ciudadanos y ciudadanas de su circunscripción vizcaína. Y todo esto es bello e instructivo, por cuanto nos recuerda que hasta la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría puede responder con soltura y eficacia. Le dijo a su abertzale señoría (que, como creo haber dicho alguna vez creo que viene de berza) que si estaba en el parlamento español representaba, no a los vizcaínos, sino a todos los españoles. Natural. Entonces, ¿por qué influye con su voto en la elaboración de una ley que afecta a los extremeños? Y por cierto, el sueldo de diputado bien que lo cobra. Don Oskar, con 'k'. Porque los buenos empezamos a cansarnos. Hispanidad redaccion@hispanidad.com