VI Encuentro Financiero organizado por el diario Expansión y por KPMG. El resumen es un cúmulo de tendencias en medio de una inseguridad creciente. La banca no sabe hacia dónde va pero los reguladores bancarios tampoco. Esto provoca una gran apertura hacia las nuevas, en una atmósfera donde hasta las sugerencias más tontas son bienvenidas. Cristina de Parias, del BBVA, constata que la banca tiende hacia la concentración dado que, con la crisis los cinco grandes bancos, han aumentado su cuota de mercado del 40 al 60%. Al parecer, en actitud compartida por tantos otros, Parias piensa que eso es bueno. Jaime Caruana, el español más importante en matera bancaria del mundo, del BIS, no entiende por qué la banca tiene tan poco margen. Sí que lo entiende, lo que ocurre es que se niega a comprenderlo. Al final, el BIS es el principal responsable de la siguiente ecuación: banco bueno igual a banco grande. Y no es verdad. José María Roldán, de la patronal AEB, le recuerda a la banca que no se puede conformar con operar en renta fija. Ya saben, la bicicleta financiera: tomar dinero al 1% y comprar deuda al 2. Desde luego, para esa función se necesitan 30 empleados, no 30.000. Y Luis María Linde, para demostrar que ya no manda nada en banca, se dedica a la macro: repite que el paro puede bajar del 20% (ya lo dijo el Gobierno) y aún así advierte de que podíamos crecer menos. No está mal. Para cuando el paro esté en el 5% en España. Para cuando se flexibilice el mercado laboral y se reduzcan los impuestos laborales. Pero eso no lo ha dicho Linde. En definitiva, el sector bancario no es un sector: es un caos. Hispanidad redaccion@hispanidad.com