El Colegio de Economistas ha decidido poner mesa y mantel a los candidatos a la Presidencia del Gobierno para que expliquen su programa económico. El céntrico Hotel Villamagna era el escenario elegido para que en la tarde del martes 10 de febrero debutara José Luis Rodríguez Zapatero. Mariano Rajoy lo hará el próximo 23-F. Lagarto, lagarto. Esperemos que no pase nada.
Zapatero estuvo brillante en el discurso y torpe en el turno de las preguntas. A los requerimientos técnicos de la nutrida concurrencia respondió con balbuceos de ignorante de la ciencia económica al que las dos tardes de economía debieran de saber a poco. ¿Los autores de su discurso? Zapatero responde: Miguel Sebastián, Jordi Sevilla, Pedro Solbes, y Juan Manuel Eguiagaray. Buenos economistas para un político de segunda al que le queda grande la candidatura a la Presidencia del Gobierno.
Pocas novedades en el discurso de Zapatero: Incremento del 30% anual en inversión en I D i, compromiso con una educación de "lujo" como garantía de la igualdad de oportunidades, compromiso en la lucha contra el "creciente" fraude fiscal, simplificación del sistema tributario español y compromiso decidido con el déficit cero. Zapatero quiere convertir el IRPF en una herramienta anticíclica. Para ello elevará el mínimo exento hasta los 22.000 euros dejando a 7 millones de contribuyentes exentos de tributación.
Además, reafirma su compromiso de rebajar el tipo máximo para que converja con el tipo del Impuesto de Sociedades. Todo ello manteniendo la suficiencia financiera porque, según explicó Jesús Caldera a hispanidad.com, "el IRPF es un impuesto que apenas recauda un 6% del PIB y existe mucho margen de recorte". ¡Menos mal que no tienen los datos para elaborar una oferta concreta!
Por otra parte, Zapatero arremetió contra el modelo económico popular que calificó de "ladrillista, especulador y poco transparente". Ante la especulación inmobiliaria propone la creación de una agencia pública de alquileres que convierta la oferta potencial en real mediante garantías de seguridad jurídica para el propietario. En relación a la precarización del empleo, el candidato socialista propone la simplificación de los modelos de contratación, el fomento del contrato a tiempo parcial y la reforma del INEM mediante "el diálogo y el consenso con los agentes sociales". Por último, ante lo que califica como "abandono de la industria", el PSOE propone la creación de un foro del sector que evalúe el impacto y afronte la deslocalización con innovación y creatividad.
Zapatero también propone el fomento de foros similares para afrontar Kyoto, la estabilidad del empleo, la I D y el turismo, que, a su juicio, presenta "síntomas de agotamiento". Todo ello aderezado de crítica politiquera al PP y de un permanente discurso sobre la productividad, cuyo "copyright" descansa en Dionisio Martín Sanz, autor del Plan Nacional del Trigo y brillante asesor económico del antiguo régimen.
