Tiempo de opas: UF también fuerza su beneficio
Como informara Hispanidad el 14 de diciembre de 2005 (Sáenz quiere venderle Cepsa a Florentino Pérez), el consejero delegado del Santander Central Hispano, Alfredo Sáenz, ofreció a su amigo, el presidente de ACS, que controla Fenosa, venderle su participación en la petrolera. Cepsa es ahora motivo de litigio entre el Santander y la petrolera francesa Total, que controla el 40% teóricamente y en la práctica un 45% de la petrolera, aunque quien controla la gestión es el Santander.
La venta es compleja, por cuanto los franceses quieren que Cepsa caiga en sus manos como fruta madura. En cualquier caso, el presidente de Fenosa, Pedro López Jiménez, ratificó la noticia de Hispanidad en la mañana del martes 28: al afirmar que no descartaba ninguna alternativa sobre Cepsa. Para ser exactos, dijo que las tres vías eran posibles: vender, mantenerse o comprar la participación del SCH (36%).
Y eso, a pesar de que la deuda de Fenosa continúa siendo elevada, lo mismo se puede decir de ACS, a punto de hacer con el 35% de Fenosa tras haber comprado con deuda. No obstante, la gran oportunidad de unir la eléctrica y la petrolera es algo que merece ser tenido en cuenta. Lo que está claro es que, desde la llegada de ACS, han dejado de hacerse apuesta para saber si Fenosa caía en manos de la petrolera italiana ENI o de la eléctrica italiana ENEL. Por de pronto, López Jiménez ya ha anunciado que este mismo año se ejecutará la opción del 30% de EUFER, la sociedad de energías renovables que tiene a pachas con ENEL, al igual que también cincuenta por cincuenta, Fenosa el socio de ENI en UF-Gas.
Por lo que respecta al resultados de 2005, Unión Fenosa obtuvo un beneficio neto atribuible de 815 millones de euros, frente a los 380 del ejercicio anterior. Ahora bien, ello se debe a la venta de atípicos, en especial a la participación en AUNA. Más arriba, el EBITDA fue de 1.482 millones de euros, con un incremento del 20%. Eso sí, este ha sido el año de la incorporación de Fenosa al gas, por lo que los ingresos crecieron un 36%, hasta los 4.472 millones de euros.
Lo sorprendente es que no se hayan aprovechado los buenos resultados típicos así como los atípicos para reducir deuda, en lugar de repartir dividendo. En tiempo de opas hostiles, al parecer, todas las eléctricas quieren tener contento al accionista y no muy líquida la caja, porque la liquidez ha pasado a convertirse, no en argumento propio, sino del adversario. Es verdad que la deuda financiera se redujo de 7.336 millones de euros a 6.228. No obstante, el apalancamiento, aunque ha caído hasta el 54%, casi en la media del sector sigue siendo muy alto.
Más cosas. El mercado del gas, el combustible de moda para producir electricidad, está que arde. En Fenosa consideran que el precio, ya disparado, pude subir entre un 10 y un 20% más, hasta situarse en la estela del petróleo. Un verdadero desastre para quien no tiene comprado gas a buen precio porque además, en el mundo hay escasez de gas, y todos están dispuestos a comprar con tal de asegurar el abastecimiento.
Respecto a España, el negocio, dice el presidente de Fenosa, está en la generación. La distribución es un negocio regulado y maltratado. Y respecto al debate nuclear, López Jiménez, que como todos los eléctricos es un firme partidario de la nuclear, recuerda que, al menos, ahora el tema nuclear ya es comentable, y se puede hablar de él.
En cualquier caso, a Fenosa le interesa ahora más que sea Gas Natural quien gane la OPA, para poder así acceder a activos, y no E.ON, quien podría quedarse, a pesar de financiar al 100 por 100, su OPA, con parte de la compañía y recuperar dinero invertido vía venta de activos.