La críticas por la chapucería con el FROB arrecian. El Banco de España se defiende asegurando que si de ellos dependiera, la reestructuración estaría lista. Lo cierto es que en el resto de países ya han acabado las ayudas cuando España aún no ha empezado. Públicamente Ana Patricia Botín (Banesto) abrió fuego la semana pasada con una pequeña crítica a un FROB que está bien, pero que debería apresurarse. Este viernes, Jaime Echegoyen (Bankinter) compartía la misma opinión: Era un tema necesario, se está haciendo bien, señaló Echegoyen. Aunque suele evitar las críticas, concluyó: Es preocupante que todavía no se haya empezado a aplicar el dinero del FROB Podemos llegar tan tarde como hemos llegado a tantas otras cosas.
Sin embargo, la clave es que la banca española no necesita ayuda, salvo en el caso de Caja Castilla-La Mancha. Sin embargo, el Gobierno se ha empeñado en fusionar cajas para tener un sistema de fiel. El FROB era un plan de salvamento innecesario, venido de la mano de la crisis en el exterior, que se ha encontrado con la oposición de los principales perjudicados: las comunidades autónomas.
