Sr. Director:
El hecho de que el Gobierno tenga que rebañar de distintos ministerios para reunir los 400 millones de ayuda a los parados sin prestación revela la improvisación de una medida introducida a última hora en la negociación con los sindicatos, pero también su tufillo electoral.
El hecho de que el Gobierno tenga que rebañar de distintos ministerios para reunir los 400 millones de ayuda a los parados sin prestación revela la improvisación de una medida introducida a última hora en la negociación con los sindicatos, pero también su tufillo electoral.
Al abarcar desde las elecciones municipales hasta las generales de 2012, este subsidio parece orientado a servir de propaganda partidista. Al PSOE le quedan pocos argumentos sociales que vender y éste es su clavo ardiendo.
Jesús D Mez Madrid