Obama se adelanta en Oregón, pero Clinton no tira la toalla

Barak Obama y Hillary Clinton se repartieron los dos estados donde se celebraban primarias este martes. Clinton ganó en Kentucky, un estado pobre de mayoría blanca, rural y de clase obrera, mientras Obama lo hizo en Oregón, más próspero y con predominio del voto progre. Las estimaciones previas a los recuentos definitivos otorgan al senador de Illinois le faltan 75 delegados para ser elegido candidato en la convención demócrata de agosto. Deberá conseguirlo en Puerto Rico, Montana y Dakota del sur, donde sólo se ponen en juego 86 delegados.

Mientras Barak Obama habla en pasado de su rival, Clinton no da la batalla por perdida. Son los superdelegados los que decidirán el resultado y, por los compromisos conocidos hasta ahora, estos darían a Obama la victoria. En cualquier caso, ambos candidatos parecen decididos a morir con las botas puestas, por lo que el sueño de no profundizar en la división y formar una candidatura conjunta se aleja definitivamente.